1. Padre, fui creado en Tu Mente, como un Pensamiento santo que nunca abandonó su hogar. He de ser por siempre Tu Efecto, y Tú, por siempre y para siempre, has de ser mi Causa. Sigo siendo tal como Tú me creaste. Todavía me encuentro allí donde me ubicaste. Y todos Tus atributos se encuentran en mí, pues Tu Voluntad fue tener un Hijo tan semejante a su Causa, que Causa y Efecto fuesen indistinguibles. Que tome conciencia de que soy un Efecto Tuyo y de que, por consiguiente, poseo el mismo poder de crear que Tú. Y así como es en el Cielo, sea en la tierra. Sigo Tu plan aquí, y sé que al final congregarás a todos Tus Efectos en el plácido Remanso de Tu Amor, donde la tierra desaparecerá y todos los pensamientos separados se unirán llenos de gloria como el Hijo de Dios.
2. Veamos hoy la tierra desaparecer, al principio transformada, y después, una vez que haya sido perdonada, veámosla desvanecerse completamente en la santa Voluntad de Dios.
REFLEXIÓN:
No hay más que agregar que repetir la oración de hoy con todo el corazón, porque allí está plasmada nuestra esencia y todo lo que por siempre hemos sido:
Soy un “Pensamiento santo”
de la Mente de Dios.
Soy su efecto, Él mi causa, y
“poseo el mismo poder de crear”
de mi Creador.
“Y así como es en el Cielo,
sea en la tierra”, y
así como es mi Padre,
Soy Yo.
Amén.
Lecturas complementarias:
SEGUNDA PARTE: Introducción
https://uncursodemilagroscadadia.blogspot.com/p/segunda-parte-introduccion.html
2. ¿Qué es la Creación?
https://uncursodemilagroscadadia.blogspot.com/p/11-que-es-la-creacion.html


Muchas Gracias, ¡qué alegría leer esta página todos los días!
ResponderBorrarGracias a ti Luis. Entonces ha valido la pena transitar este camino. Un abrazo.
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